El Losar es el día primero del año para los tibetanos y otros pueblos orientales. Al tratarse de un calendario lunar, comienza y termina con una luna nueva. Ello implica que sus fechas varían con respecto al calendario solar, dando lugar a que la celebración de esta festividad no esté señalada con una fecha fija, como sucede con el calendario occidental.
Este año, siguiendo el tránsito de las lunaciones, el primer día del Año Nuevo Tibetano se corresponde con el martes 21 de febrero. El animal y el elemento que lo gobiernan, de modo similar al calendario chino, es la liebre de agua. Dejamos atrás el tigre, también de agua, para dejar paso a un animal menos temible, aunque, sin lugar a dudas, mucho más esquivo.
La cultura tibetana está inextricablemente ligada al Buddhismo. Por tanto, para los budistas de las tradiciones tibetanas es tiempo no solo de celebraciones, como haríamos en las festividades al uso, sino, además, y por encima de todo, un tiempo para dedicarnos a la práctica de la meditación y a rituales de purificación con los que renovar nuestro compromiso de trabajar por el bien y la felicidad de todos los seres. Y es que en el Losar no solo pedimos deseos para nosotros, que también, sino infinitos buenos deseos que beneficien a todos sin excepción. Tal es el ideal del bodhisattva.
Este año, como no podría dejar de ser distinto, nos reuniremos alrededor de nuestro árbol bodhi en la Finca Anatot, en Arucas, lo engalanaremos con coloridas banderas de oración y meditaremos con toda nuestra mejor disposición y alegría. Contemplaremos también el estanque de plantas acuáticas que los propietarios de la finca tan amablemente nos han ayudado a construir y la figura del Buddha que se ha instalado a los pies del árbol, bendecida por los Lamas.
La energía espiritual de este espacio ha ido creciendo con los años, y se ha convertido ya en un santuario cargado de bendiciones, capaz de reclamar nuestro silencio y contemplación.
Mantente atento a nuestro calendario de celebraciones, y no dejes pasar la oportunidad de celebrar el Losar con nosotros.
¡Feliz Año de la Liebre de Agua!